jueves, 22 de diciembre de 2011

UNO-CUATRO


Su equipo iba ganando y él estaba inquieto. Cuando les metieron el primer gol se tranquilizó un tanto. Finalmente encajaron una goleada que le alivio por completo. Tras los pitidos finales se acercó a dar la mano al portero y le trasladó unos ánimos que ambos sabían fingidos. Da igual. Ese niñato no le iba a mandar más al banquillo. Por el momento.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

molt bo!.com sempre.
aixo es per tota la gent del zaramatimes.
Merry Xmas Everybody!!!
jimmy.

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=0A8KT365wlA
esto joder! jjejeje que torpe soy leñe!!!
jimmy.