Salir de la radio echando humo, después de un día plagado de
reuniones sindicales y malos rollos generalizados (varios compañeros van
a la calle). Lanzarse por esas carreteras de Dios hacia unos estudios
de grabación perdidos en una zona industrial de Mungia. Discutir
agriamente con la voz del GPS que se empeña en tomarme el pelo una y
otra vez (además de pronunciar “Luaxeta” como si fuera indostaní).
Finalmente llegar al estudio y reencontrame con los Subversión X y su
peña, y de regalo conocer a Aitor Abio (del que conocía varias
producciones) y a Asier de Gaua Estudioak, volver a ver a Beñat de Muxike (aspaldiko partez). La
grabación va como la seda y todo el estrés acumulado se reconvierte en
un grito de guerra: Athleeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeetic”.
Como no podía ser de otra forma los legítimos herederos del mejor
punk-rock de la margen Izquierda han hecho una canción-pepino de esas
que sirven para gozar dejando el alma. Al final mereció la pena. Ahora a
ganar la final. Aunque sea en la tanda de penalties.
5 comentarios:
Suena muy bien. Seguro que se canta con pasión por las calles, las del Athletic, of course.
Mucho ánimo con los graves problemas laborales.
Eskerrik Asko Juli Gan. En este contexto tu "nombre" es mas adecuado que nunca ;-)
AUPA ATHLETIC Y AUPA TUUUUU!!!!!!
Aupa Roberto. Agarrate a esas historias tan buenas para sobrellevar los líos del curro.
Todo parece que va de culo y parece seguir en esa dirección, pero que no nos quiten la ilusión de lo que nos gusta. Y no nos la quitarán.
A mí esas cosas, las que me gustan, como en tu caso la música, han conseguido sacarme de lo puto peor. Y no es cuestión de ser moralista, pero sobrevivir solo merece la pena si es para disfrutar de lo bueno que hay y que queda. Y para mí hay, todavía hay bastante y seguira habiendo.
Un beso enorme Susana. Ahora que llega el veranito a ver si sacamos un rato para tomar una cañas a gusto.
Muchas gracias anónimo. Estoy plenamente de acuerdo con lo que dices. Son días tristes en el curro. Están saliendo por la puerta grandes profesionales que están en su esplendor. En muchas casos además amigas y amigos con los que hemos compartido muy buenas experiencias. Prefiero no calentarme con este asunto, bastante lo he hecho ya. Espero de corazón que la justicia poética se imponga y el tiempo ponga a cada uno en su sitio. Un abrazo.
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