lunes, 30 de enero de 2012

HABANERA

Sebastián Iradier, alavés de Lantziego y hombre de mundo, compuso la primera habanera de dimensiones ultramarinas:"La Paloma". El no llegó a disfrutar de su éxito. Si Iradier fuera anglosajón, nadie lo dude, su nombre sería constantemente homenajeado y recordado en programas de “Prime Time” y por supuesto, a estas alturas existirían las correspondientes películas y series en torno a su figura. Han tenido que ser los alemanes los que gracias a un documental magnífico de Sigrid Faltin (en el que también hubo participación de ETB, todo hay que decirlo) nos han dado a conocer que existen más de 2000 versiones de la canción. Elvis Presley, Frank Sinatra y Luciano Pavarotti se encuentran en esa lista interminable. En Tanzania se considera música funeraria y en Rumanía ameniza las bodas, en estos y otros muchos lugares, como se demuestra en el reportaje, se resisten a creer que no forma parte de su folklore. “Si pudiera elegir un lugar donde volver a nacer, lo haría en La Habana del siglo XIX” dijo Xabier Lete en la presentación de su “Habanera”, en la feria de Durango de 1990. Aquellos viajes comerciales entre Cuba y la metrópoli fueron el germen de un estilo considerado “de ida y vuelta”. Entre las mercancías de aquellos barcos viajan también ocultas las nostalgias de amores urgentes y los corazones rotos. En palabras de Lete “Los labios guardan, el gusto de labios húmedos, en el escalofrío de deseo, con la desgracia de la desesperación” (“Ezpainek gordetzen dute /ezpain bustien gustoa /desiozko hotzikaran/ etsipenaren tamalez”) A diferencia de otros estilos, las habaneras tienen raíces profundas en toda la península. En lugares tan diversos como Málaga, Valladolid, Calella de Parafrugell y Getxo se celebran festivales de gran tradición, la sombra de los indianos, alargada en el tiempo, tiene , sin duda, su influencia en ello. La última feria de Durango nos ha sorprendido con la edición en un doble CD de la última actuación de Lete. Con muy buen criterio, todas las presentaciones se han respetado en su integridad, con lo que tenemos la ocasión de conocer muchos detalles en torno a su forma de ver las cosas. La niebla melancólica de la habanera, parece impregnar toda la actuación. Se diría que , como él mismo canta, “el barco se aleja despacio del puerto” y el propio poeta se despide en solitario de todo aquello que le importa. Cuando llega el turno de “Habanera” , el homenaje es para su padre, al que vio “cantar entre amigos aquellas canciones con un punto de nostagia”. “No hay nada mas bello que lo que nunca he tenido nada mas amado que lo que perdí”, le canta Serrat a “Lucia”. Algo de eso nos vienen a enseñar las habaneras: en el mejor de los casos las experiencias de toda una vida son una pequeña txalupa en el mar. Siempre quedarán islas desconocidas, besos sin dar. Ya lo dijo Victor Hugo: “La melancolía es el placer de la tristeza”

5 comentarios:

Juli Gan dijo...

Hace bastante saqué un post sobre "la paloma". En Alemania es todo un hit imperecedero. http://labasquebondissante.blogspot.com/2010/10/la-paloma.html
La habanera tiene un sabor especial que sale hasta en las óperas. Bizet coló una famosísima en Carmen que él creía popular, pero que era de Iradier. Y en mi casa se suele cantar la habanera del Guria:"Joxe Manuel, Manuel Joxe. Joxemanuelen batela, txitxarrua ta berdela..." Fantástico post, Nineuk.

nineuk dijo...

Eskerrik Asko Juli. Es cierto, no había reparado en que Joxe Manuel es tambien una habanera...cualquier día de estos me hago un disco habanero (y me voy a La Habana a presentarlo)

Juli Gan dijo...

Pues sí que voy bien! Porque me he puesto a cantarla y es "Joxe Migel" Sí, sin "u" :P Este alemán que me quita las cosas.....

karazo dijo...

cuando yo estuve niña en la habana,yo no lo puedo olvidar, tanto cadiz desde mi ventana, akella mañana pude contemplar...

karazo dijo...

vale m e he olvidado lo de tacita lejana.