miércoles, 17 de septiembre de 2008

RICHARD WRIGHT

Vaya también mi tributo a otro que nos deja. A este paso el blog va a parecer el monumento a los caídos, pero en fin. También Richard Wright merece un lugar en el recuerdo. Recuerdo de un tiempo en el que Pink Floyd hacía música para perderse dentro. Cuando la banda había dejado atrás a Syd Barret y sus experimentos lisérgicos y trataba de encontrar nuevos caminos. Hay que reconocer que son muchos los buenos discos que realizaron (Atom Heart Mother, Meedle, More, Ummagumma...) antes de su entrada triunfal en el mainstream (Dark Side Of The Moon, Wish You Were Here, Animals, The Wall...) Después todo se hizo feo: discos feos llenos de retales, enfrentamientos patéticos, enfados y pseudo-reconciliaciones, tribunales...ellos mismos se volvieron feos y contribuyeron a llenar de mierda, o peor, de aire su leyenda. Hace pocos años moría Syd Barret que decía no recordar nada de ninguna banda lamada Pink Floyd y ayer lo hacía Richard Wright, comido por un cáncer fulminante a los 65 años. Lo recupero del film "Pink Floyd en Pompeya", que un Roberto boquiabierto disfrutó hace muchos años en los ciclos de cine musical del colegio Salesianos de Barakaldo, cuando todo parecía más auténtico, más guapo.

1 comentario:

Joseba Lafuente dijo...

¿Sabes si vende los teclados?
Mu weno el ricardito.
He colgao el smash-up ese al final.

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