Supongo que todos los musicaholics tenemos nuestros discos fetiche. A veces igual tienen que pasar varios años para que el balance se haga más real y calcules con más acierto cuales de verdad supusieron un antes y un después, un momento clave en el que la música se convirtió en parte fundamental de tu vida. En términos mas concretos incluso: Si uno se sincera consigo mismo, salen los discos a los que , de verdad, dedicaste muuuucho tiempo. Aquellos que no se desgastaban nunca...o casi.
En mi caso, la lista de "flechazos musicales" es bastante amplia. Cuando algo me llega tiendo a dedicar meses a descubrirlo a fondo. Sin prisas, paladeando cada nuevo disco (aunque sea viejo) del descubrimiento y sacándole chispas al susodicho. Quienes me conocen saben que puedo ser muy pesao con los romances musicales, es por ello que en mis etapas de periodista musical me ponía muy nervioso eso de "Escúchate estos cuatro dicos y a ver si encuentras algo interesante pal martes". Normalmente hasta la tercera escucha soy incapaz de concluir si un album me llega o no. Eso sí, la tercera suele ser decisoria.Suelto todo este rollo porque quiero hablar de un disco de extraño título: "Get yer ya-ya's out" que sin duda ostenta, aun hoy , el Top-One de escuchas consecutivas por mi parte.
Era un tiempo en el que pocos tenían montañas de discos en casa. Los elepés pasaban de mano en mano entre los yonkis musiqueros y la capacidad de selección se agudizaba enormemente. Para poder entrar en ese círculo , uno debía hacer sus aportaciones , así que un buen día, decidí que había que saltar al mundo del LP (hasta entonces manejaba un maletín de traginados singles, muchos heredados de mi hermano mayor) . El escaparate de la "Discoteca Serrano", escudriñado a conciencia durante varias sesiones post-escolares, conoció entonces un inquilino menos.
El disco refleja la controvertida gira de los Rolling Stones en 1969 por Estados Unidos, aquella que acabó con los incidentes sangrientos de Altamond. Pero se centra en el Madison Square Garden de New York. Curiosamente, no es un disco oficial de los Rollings. Cuando se publicó, la banda tenía en marcha su propio sello y la anterior disquera, la DECCA, se dedicaba a competir con ellos con su propio material: directos, recopilatorios, remezclas... aunque hubo verdaderos fiascos, tambien surgieron perlas del pasado que los Rolling no quisieron publicar. Quizá sea por eso que este pedazo de disco nunca figura en las listas de los 100 mejores en ninguna revista de prestigio.
Recientemente me llamó la atención verlo entre los pocos elegidos que se reeditan en vinilo. Tambien me sorprendió que Jaime Urrutia lo glosara entre sus favoritos en una entrevista radiofónica. Animado por estos hechos busqué entre las cajas mi preciado tesoro adolescente y finalmente allí surgió, con su carátula embadurnada de cola (un experimento que hice para "protegerla") donde aparece Charlie Watts (¡una portada para él solo!) en plan titiritero llegando a la ciudad.
Saqué el masacrado disco de plástico y lo volví a pinchar en mi vieja y desterrada pletina. Bajo la espesa y reconfortante lluvia del tiempo volvió a sonar ese "Symphathy For The Devil" canalla, irónico, gamberro, liberador... una versión para el directo que abandona cualquier sutileza para meterse de lleno en la orgía satánica, en la pura fiesta.
Dicen las crónicas que en aquella gira, Ike & Tina Turner actuaban como teloneros. Una decision arriesgada , ya que estaban en plena forma y los directos de Tina eran volcánicos a más no poder. Algo debió de influir esto en los Stones, que se mostraban más libres que nunca. Ninguno de los posteriores "lives" de la banda (y mira que han hecho) suenan tan convincentes como este. Aunque los Beatles ganaron casi todos los asaltos en los sesenta, los Rolling ganaron una importante batalla: el directo. A día de hoy, el grupo más editado del mundo aún no cuenta con un directo potente de verdad.
Así que de nuevo desfilaron por donde solieran el "Love In vain", "Jumping Jack Flash", "Oh Carol", "Live With Me", "Midnight Rambler"... ¿nostalgia? supongo que sí, pero sobre todo rock&roll del bueno y en plena forma. Te adjunto la versión del "Symphaty" que aparece en el disco. Atento al duelo de solos de guitarra entre Keiht Richards (sobrio, canallón) y el de Mick Taylor (virguero, colorista)
¿Que quien ganó la guerra? ¡Y a quien le importa!
4 comentarios:
Para mi la mejor epoca de los rolling,y ya con el sticky fingers
palabras mayores.
Grande Mick Taylor,grande!!!!
Está muy bien que recuerdes estos episodios del pasado. Me parecen muy interesantes y desde aquí te animo a que lo hagas de forma periódica. De los directos de los Rolling, el Love You Live qué te parece?
El "love You Live" apareció en el 77, justo en plena eclosión punk. Yo creo que trataron de dar una versión cruda de la banda, en la línea de la portada(Gran portada mordiente de Andy Warhol). Sin embargo lo más novedoso era, (paradojicamente) la cara dedicada al puro Blues. Para mí sería el segundo mejor "live", lejos del "ya-ya's"
Pues fue uno de los primeros discos que oí de sus Satánicas Majestades, me lo pasó un amigo. También un concierto que grabé de la tele en VHS de su gira Urban Jungle en Madrid (año 90) que ya por aquel entonces decían que iba a ser la última.
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