Para mañana, Aqui Macondo (Radio Euskadi), hemos realizado un programa monográfico, dedicado a la LUPE, el auténtico ciclón caribeño que revolucionó la música afrocubana en los
50 y sesenta..
Muchos años antes del punk, años antes de las ardorosas puestas en
escena de Janis Joplin o Patty Smith, una cantante cubana daba que hablar por
sus tormentosos éxtasis escénicos y sus polémicas apariciones públicas. Conoció
la gloria y el fracaso, ganó mucho dinero y terminó en la miseria. Grandes
intelectuales han glosado su figura, que ahora está rodeada de una aureola
mítica. Sobre La Lupe, el escritor Guillermo Cabrera
Infante escribió lo siguiente:
"Salía
una mulata que daba la impresión de ser a la vez fornida y delicada, según se
mirara a las grandes tetas o a los grandes brazos y cantando, interpretando
(ese es el verbo adecuado) un calipso de Adolfo Guzmán. Pero se convertía de
pronto en un temblor demente, en una incursión trepidante, en un verdadero
ataque. La cantante misma primero parecía poseída por el demonio del ritmo y su
miedo escénico se convertía en una forma de terror.- 'Hoy tengo el diablo en el
cuerpo y me abrasa la fiebre de tu ardor / Este delirio por ti me consume /
¡hoy tengo el diablo!'. La cantante ahora se golpeaba, se arañaba y finalmente
se mordía las manos, los brazos. No contenta con este exorcismo musical, se
arrojaba contra la pared del fondo, dándole trompadas con los puños y con uno o
dos cabezazos se soltaba, literal y metafóricamente, el moño negro. Tras
aporrear el decorado, atacaba al piano y agredía al pianista con una furia
nueva. Todo ello, es milagroso, sin dejar de cantar ni perder el ritmo de
cálido calipso que ella convertía en una tórrida zona musical'.
Así
evocaba Cabrera Infante su contacto con La Lupe en el antro habanero La Red, en
una Cuba en plena euforia de la revolución. Principio de una era en la que no
encajarían: ambos terminarían exiliándose.
La Lupe se llamaba en realidad
Victoria Yolí Raymond, nació el 23 de diciembre
de 1936 en
Santiago de Cuba
y fallecida el 29 de febrero de 1992
en Nueva York.
También conocida como "la Reina del Latin Soul", se introdujo en el mundo
de la música cantando en distintos locales habaneros, una vez terminada, por
exigencia paterna, su carrera de magisterio.
En 1959
formó, junto a su primer esposo, Eulogio "Yoyo" Reyes, el Trío
Tropicuba, que comenzó a presentarse de forma permanente en el legendario bar
de La Habana
La Red.
Su forma
de cantar, llena de energía y con un cierto toque estrafalario, la hizo famosa
casi inmediatamente en toda la isla.
Tras los
primeros meses de euforia revolucionaria, el régimen cubano comenzó a controlar
con mano férrea lo que ocurría en esos clubs nocturnos, siempre sospechosos de
albergar la contrarrevolución
La
tensiones con los Estados Unidos extienden el lema: “con la revolución o contra
la revolución”, sobraban todos los indecisos. La Lupe y otros muchos artistas
optan por exiliarse. Así viajó a México
y, a los pocos meses, a Nueva York, donde empezó a cantar en un bar de mala
muerte: La Barraca.
Allí fue
"descubierta" por el percusionista Mongo Santamaría, con el que grabó el disco Mongo
Introduces La Lupe (1963)
.Ciertas desavenencias con Santamaría fueron aprovechadas por Tico Records para proponer a la artista
formar un tándem con Tito Puente que grabó cuatro discos que tuvieron un éxito
inaudito y la catapultaron al estrellato.
Más famosa
que Celia Cruz
en los años 60, el éxito de La Lupe se debió en parte a su canto aguerrido, su
peculiar y única manera de afrontar el bolero y la cada vez mayor influencia de
una música latina alejada de los formalismos de salón que imperaron, en los
años 50, en la ciudad de los rascacielos. Ese canto arrabalero, más propio del
barrio que de un salón de baile, halló en La Lupe su mejor exponente femenino.
Viajó por
muchos países de la región y fue cartel principal en los reputados carnavales
de Caracas,
en los que ganó premios a la mejor cantante y llenaba el aforo de sus
presentaciones.
En Nueva York
fue la primera cantante latina que actuó en el Carnegie Hall
y el Madison Square Garden. Fueron los días del
esplendor para la Lupe, a los que pertenecen grabaciones eufóricas como esta:
En los
años 70, sin embargo, varios factores incidieron para que su estrellato
decayese. Su vida personal y
sentimental era un auténtico terremoto. Ella era santera
y muchos de sus "mayores" se aprovechaban de su influencia y dinero;
su segundo esposo, Willie García, empezó a desarrollar un cuadro esquizofrénico
que la obligó a gastar ingentes sumas de dinero en tratamientos médicos. Sus
hábitos manirrotos hacían que, por ejemplo, gastase los 20.000 dólares que
ganaba en un concierto en un nuevo abrigo de piel. También, la consolidación de
la salsa contribuyó a que sus producciones
musicales fuesen perdiendo relevancia.
En 1974 el sello disquero Tico Records fue adquirido por Fania Records
y sus directivos, que habían logrado que Celia Cruz
se mudase a la ciudad y formase parte de las portentosas Fania All Stars,
decidieron dejarla a ella en un segundo plano.
Así que
tenemos a finales de los setenta a una Lupe pobre, con su mansión hipotecada,
se mudó a Puerto Rico
durante unos meses mientras esperaba recibir algún contrato para cantar en los
escenarios. El viaje a Puerto Rico le trajo problemas con varias cadenas
televisivas, su peculiar estilo de bailar e interpretar algunas canciones
fueron más allá de lo permitido.
He aquí un
documento sonoro del paso de La Lupe por la ista puertorriqueña. . Es su
aparición estelar en el show de “El gallo”
Aunque era querida por mucha gente en la isla, lo cierto es que en
esta época Puerto Rico es mucho más puritana de lo que era Cuba y los excesos
de La Lupe no fueron siempre bien encajados. Nadie le miraba, nadie le escuchaba, nadie le
hablaba. Tampoco nadie le llamaba porque... había perdido el móvil. Así que
localizó un fijo, llamó a su número y una voz campanuda le dio una clara
explicación: “No Existe”. Todo estaba aclarado.
En una
presentación para el Canal WAPA, se desprendió de toda su ropa al interpretar
una canción. Nadie entendió aquello en su debida dimensión y la Lupe abandonó
Puerto Rico rodeada de incomprensión.
Tras la
amarga experiencia Puertorriqueña, optó por regresar a Nueva York.
A finales
de los 80 se convirtió a la religión evangelista.
El 29 de febrero de
1992 sufrió un paro cardiaco fulminante mientras dormía en un pequeño
apartamento que compartía con su hija Rainbow en el Bronx. Le sobrevivieron su
esposo, William García; su hija, Rainbow, y su hijo, René Camaro (cuyo padre
fue Eulogio Reyes). La tumba de La Lupe se encuentra en el cementerio St.
Raymond's del Bronx..Hemingway la llamó “La creadora
del arte del frenesí”,Jean Paul Sastre la llamó “Un animal musical” Picasso la
definió como “Un genio”, Y un íntimo
admirador, Guillermo Cabrera Infante la llamó “Fenómeno fenomenológico”.
2 comentarios:
Joder,me viene a la kabeza,un artikulo tuyo de "la lupe" en el
fanzine "EL TUBO"(igual "muskaria"u otros),o es ke se me vá la pinza!! ,te suena.................
Si hombre, hace muchos años que me encanta La Lupe y efectivamente, ya hice un artículo sobre ella en el Tuibo hace algunos años. Si es que soy mu pesao ;-)
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