
Menuda putada. Un día cometes un error o te ves involucrado en una cadena de errores y entonces alguien, en una hábil labor investigadora va rastreando tu huella digital. Puedes haber hablado de mil cuestiones humanitarias, puedes haber apoyado todo tipo de campañas altruistas o haber demostrado ser una autoridad en tal o cual tema... como alguna vez se te haya ocurrido poner en Facebook o en Twiter un pequeño comentario bobo sobre la velocidad a la que va tu tren o sobre el pedo que has agarrado en fiestas no faltará quien decida que tu necia ocurrencia sea titular de prensa y motivo posterior de sospecha, o bien que tu maravilloso currículum quede descartado.
Y sí, puedes borrar "de tu biografía" muchas cosas, pero teniendo en cuenta que A: Ellos lo siguen guardando y B: El mismo dato de que has borrado cosas ya puede delatarte.
Siempre ha sido posible que recojan pruebas sobre tu trayectoria en registros o archivos, pero es que ahora las posibles cagadas están a un par de clicks.