Cuando José Madrid Santurtún me propuso posar con un
disco "importante en mi vida" tuve que iniciar un auténtico proceso
de sinceridad conmigo mismo. No, no han sido cientos los discos verdaderamente
decisivos y en diferentes etapas de mi ya prolongada vida han ido cambiando de
estilos. Podría haber elegido el Aladdin Shane de Bowie, al que saqué
verdaderas virutas, o el Siembra de Ruben Blades y Willie Colon, que me abrió
las puertas a un nuevo planeta musical, ya rozando la treintena. Si fuera por
las veces que lo he escuchado ganaría probablemente el "Get Yer Ya-ya's
Out" de los Rolling, con el que viajé infinitas veces al Madison Square
Garden de Nueva York. No le andaría lejos el "Never Mind The
Bollocks" de los Pistols, que fue como un Tsunami que arrasaba con todo lo
demás. En la terna también andaban los primeros Clash, Santana y su primera
propuesta salvaje, cualquiera de Blondie, el Sg. Peppers de los Beatles, el
primer discazo de Canovas Rodrigo Adolfo y Guzmán, el "Maita
Herria..." de Lertxundi, que en su día me aprendí de memoria... el disco
del plátano de la Velvet con Niko...Pero elegí el Rock & Roll Animal. José
nos pidió unas líneas para explicarlo y esto fue lo que escribí:
Me trajeron el Rock & Roll Animal de
Escocia. Mi amigo Imanol pasaba allí los veranos, aprendiendo inglés con
una familia y me lo compró por encargo. Era la versión no
censurada, todo un lujo. En España se publicó con el tema
Heroin cercenado y sustituido por tres canciones de otro disco. Una
salvajada. Lo escuché millones de veces, casi siempre de sobremesa.
Viajaba así hasta la "Howard Stein Academy of Music" y los veía
a todos. Una bandaza que sacaba llamaradas de sus instrumentos al servicio del
mejor Lou Reed : el ave fénix que surgía de
las sombras del Underground para alcanzar la gloria sin perder ni un
gramo de misterio. Disfruté como gorrino en el barro de cada surco de
esa joya. Todavía lo hago. Y si tengo que quedarme con un tema , me quedo con
"Lady Day", una dramática, desesperada declaración de amor imposible.
Despúes, viendo la exposición, me sorprendió la
cantidad de discos elegidos por los demás "modelos" que también
me habían marcado a mí. Tengo la sensación de que ese ejercicio de sinceridad a
la hora de elegir un solo referente nos llevó a casi todos a la
tierna pubertad, ese momento donde se comienza a moldear nuestro gusto y donde
menos prejuicios lo condicionan.
6 comentarios:
Ya es el segundo vinilo que me compro "por tu culpa", por favor, sigue así!!!
Apuesto a que no te arrepientes ;-)
Seguro que no!!! Según he leído este artículo me he puesto a escuchar esta animalada de disco y me parece alucinante y encima es todo una sorpresa, ya que Lou Reed no ha estado nunca en mi discografía por pensar que no era de mi rollo, pero ahora me he dado cuenta del error cometido.
Por favor, siga usted teniendo ese buen gusto musical, que se nota reposado como los buenos vinos por largos años de barbecho en buena música.
Mi profe de guitarra, un treintañero con buena cultura musical, me sorprendió un día cuando me dijo que no conocía este disco. Comprendí entonces que títulos importantes para una generación pueden ser ignorados por las otras. Creo que eso también me empujo a elegir este disco, no tan conocido, al parecer, como yo creía.
Se han editado aproximadamente unos 6,5 millones de discos en vinilo, de los cuales 1,9 millones serían de Rock (incluyendo todas las posibilidades como el Punk), así que como para conocer y escuchar todos y cada uno de ellos, imagínese el pedazo de discografía que tendría que tener y eso hablando sólo de Rock. Es materialmente imposible escuchar todo y estamos muy influenciados por nuestro entorno social, Zarama por ejemplo se escuchaba en mi barrio (Hortaleza), gracias a un servidor porque en los "mandriles" no era un grupo muy conocido que digamos y cuando me fui a vivir a Guadalajara mucho menos y eso que el "Dena ongi dabil" es un discazo, pero seguramente fuera de mi entorno en mi barrio, nadie conoce, en cambio en Euskalherria habrá poca gente que no conozca.
Una de mis ultimas joyitas "secretas" es Monophonics, especialmente el LP "In your brain", si tiene un ratejo dele una escuchada si le apetece disfrutar del buen soul setentero.
Pues te aseguro que lo voy a escuchar. hay que reconocer que esto del Spoty y similares te ahorra muchos dolores de cabeza. Supongo que de eso se aprovechan. Supongo ;-)
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